Definitivamente en nuestras sociedades la intolerancia es una de las mayores “enfermedades” existentes, algunos simplemente son racistas o xenofobos, sin embargo otros, pueden llegar incluso a quitar la vida de otra persona, por un error, por ejemplo lo sucedido en Ucrania, donde un cliente acabó con la vida de un camarero, luego de que éste le llevara una sopa, en la cual había una mosca muerta.
El pasado mes a un restaurante ubicado en una pequeña ciudad del Óblast de Crimea, inmediatamente llamó a un camarero, el cual luego rápidamente trajo consigo el pedido.
A los pocos minutos,llamó nuevamente al camarero, esta vez para recriminarle por una mosca muerta que se encontraba en la sopa; el empleado se disculpo, sin embargo eso no fue suficiente para el hombre. Los ánimos fueron aumentando y minutos después, el hombre sacó un arma de su bolsa y disparó en la cabeza al camarerp, quien murió inmediatamente.
El asesino ahora se encuentra en prisión, donde espera un juicio por su crimen, aunque él asegura que no tenía intención de matar el empleado, ya que solo fue un momento de furia.
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